martes, 12 de septiembre de 2017

Cuando dar de baja tu coche

A día de hoy, en la red de redes, podemos encontrar más de una web en la que nos dicen
cuándo un coche está obsoleto. Sin embargo, a efectos prácticos los datos de estas páginas
web no son muy fiables ya que en la inmensa mayoría de los casos no tienen en cuenta
algunos aspectos que pueden ser cruciales. Sin embargo, en las líneas que vienen a
continuación, nosotros sí vamos a darte algunos ejemplos prácticos en los que un coche puede
darse de baja de manera definitiva. Unos casos que seguramente te pueden ayudar mucho si
eres de los que piensa que su coche no tiene mucho más recorrido.

El primer caso con el que nos encontramos, como no podía ser de otro modo, es en el que nos
encontramos en la situación en la que lo que queremos es comprar otro coche. En este
momento tenemos que tener en cuenta que tener de alta dos vehículos implica el pago de dos
cuotas de seguro y de varios impuestos de circulación. De ahí que sea una buena idea acudir a
nuestro concesionario y aprovechar que por nuestro coche usado no solo nos van a dar un
suculento descuento sino que al mismo tiempo lo van a dar de baja por nosotros. Ni que decir
tiene que si no vamos a ir a un concesionario, también es interesante que, por nuestra cuenta,
demos de baja el vehículo para evitar gastos innecesarios.

A pesar de que muchas personas se resisten a dar de baja su coche, lo cierto es que hay
ocasiones en las que vemos de una manera bastante clara que nuestro querido vehículo ya no
nos puede ofrecer nada más. Y no solo estamos hablando de que sea, o no, capaz de llevarnos
de un lugar para otro sino de que nos ofrezca un mínimo de seguridad. Es entonces cuando
tenemos que plantearnos darlo de baja ya que nos podemos jugar nuestra vida y la de las
personas que viajen con nosotros. Cierto es que para muchas personas puede suponer mucho
pero al fin y al cabo un coche se puede sustituir con más o menos esfuerzo mientras que una
persona no.

Dos casos en los que creemos que la baja de los coches es obligatoria. Una baja que, además,
se puede llevar sin mucho esfuerzo ya que son varios los métodos los que tenemos a nuestro

alcance que apenas suponen un trabajo adicional para nosotros.

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